Son las diferencias que la vida marca, los desprecios que el desamor logra. ¡Pero no debes caer! Yo vi tu esfuerzo por cambiar de padecer, yo vi tu lucha día a día por no notar todo eso que ahora te lastima. Y vi también tu intención de no hacer ruido, de pasar desapersivida sin causar discusiones, de no hacer notar tu dolor por estar creciendo sin sus abrazos y aún queriendo lograr el orgullo de ellos, te diste cuenta que más aumenta el rechazo.
Pero debes saber también que en este momento de lucha, en el recorrido del dolor tienes que aprender a caminar sola. Así es, cada persona se diferencia por las distintas formas de pensar, y vi que la tuya en este momento no te favorece. Tu alma es sensible, y no podes perdonarle a la vida que te de la espalda.
Pero no sientas rencor que no es bueno, sos la de siempre.. con un poco de impotencia y dolor en el pecho, pero de todas formas seguís siendo vos. No cambies, no permitas que te cambie la forma de pensar de los demás.
Quizás la solución sería taparte los oídos cuando mientras estás llorando, escuches detrás de la puerta conversaciones: "sí, lo que quieras, pero no le digas así no jode" "que necesitas, yo te lo doy" "sos mi vida, yo te amo hija"
Deberías empezar a darle valor a todo esto que has logrado, tus planes al futuro y la persona que sos.
Es la vida. El querer no se compra. Es la vida. No siempre podemos elegir.
